Carta al mundo rosa.

Pensar que estaba en ti, tan sumergida, como se puede estar dentro del mar...

Ese día yo caminaba, inquieta, y pensando en el mundo. Un mundo que generalice de una manera tan tétrica, que en estos momentos da miedo recordarlo. Ese mundo, no era más que fantasía, te sentías viva y completa cuando estabas rodeada, pero mi pregunta cada día era ¿por qué me siento inerte? ¿Acaso no es lo que quería? Y déjeme decirle que la respuesta a la primera pregunta era por fatua, que también rellena la segunda, pero esta tiene una respuesta sencillamente completa, ¡NO!

Hay tantas cosas que verdaderamente te hacen daño, pero más si son en exceso. Ese mundo rosa del que les trataré de hablar lo más puntual que pueda, es excesivamente peligroso.

Aquella tarde llegue de mis mañanas rutinarias, algo triste y desconsolada, ese día de verdad sentí que me faltaba mucho ó tal vez el problema radicaba en que no tenia nada, nada más que mentiras, triste realidad. Me encontraba en ese mundo, mundo rosa, expresado de esa manera, pues todo parece de ese color. Estas tan rodeado de personas que te dicen "te quiero", "te necesito", "te amo", "te extraño", y esas ciertas otras cosas que tú te llegas a creer, sólo porque te lo repiten diez mil veces. Pero lo rosa te sumerge, te devora cuando menos lo piensas. Si le das la espalda te meten obligatoriamente en un laberinto de mugre y suciedad, asqueroso, tan poco sutil que parece emético. Allí están los abrazos más falsos que podrías recibir o simplemente ni te los dan. Siempre te engañaran, tenlo por seguro; a veces me llegue a enfadar mucho, ellos parecen que sufrieran de alzhéimer, te clavan hoy el puñal así sea de frente o lo mas normal, por la espalda; y mañana te estarán diciendo "hola" con una sonrisa en su rostro, patética. Todos son así, es triste, si, como el mundo en si.

Comencé enfurecida y triste a preguntarme ¿Por qué este mundo? ¿Que están pensando las personas? ¿Por qué tan poca imaginación? ¿Cómo salir? ¿Cuál es el otro mundo? ¿Dónde esta?;... muchas otras más, hasta que llegue al punto mas maravilloso de todos ¿Por qué no estoy allí dentro? … naturalmente tuve respuestas para casi todas las preguntas, se me escapan algunas que aun trato de saber. Pero sabía la respuesta a la última y fue algo así:

-Cuando tenía la edad de 12 años, creo, empecé a ver a mí alrededor las más grandes incógnitas de la sociedad para mí, en ese momento. Y saben, mi respuesta siempre era un reacio para ellas. Estaba sola, aunque siempre lo había estado, pero ésta ves no quería ni tener amigos, porque en realidad no eran amigos, inicialmente escuche música que llenaba mi espíritu de libertad,  a ver mi mundo, un mundo que estaba creando a mi manera, en mi mente, mi alma, mi cuerpo, mi habitación, mi casa, mi refugio. Pero desafortunada y afortunadamente a mi vida volvió cierta persona, cuyo nombre no diré, volteó todo lo anterior, e hizo que todo se descontrolara, no estaba acostumbrada a estar con alguien tan cerca y mucho menos si ocupaba mi espacio. Y me revele, silenciosamente, me revele. Pero entonces ya no me gustaba estar en mi refugio, también era ya de alguien mas. Debía salir, salir a respirar aire puro para mi mente, así que salía a poner mi cuerpo en el suelo para poder ver el cielo y aquellas cosas que mi imaginación pudiera crear, poder pensar sin que te estén hablando. Pero para mi cruel destino, me hablaron, esas personas del mundo rosa, ese día, no miento, me sentí feliz -¿por que será que la primera ves de todo estas acompañado de alguien?- sonreí y me divertí. Como era de esperarse, compartir con ellos mis días siguientes. Al principio no les niego que se me era difícil, aterrador y miedoso pues sabía a que me atenía, entonces debían irme a buscar. Sinceramente debo comentarles que yo era como un niño, en cuerpo de niña y de esa manera actuaba, aun lo hago pero no completamente. Pero a la final ellos me metieron en un cofre, adentro había una pequeña imagen, como las que dicen "paz y amor", les juro que me asuste, pero luego se me fue de acostumbre -me siento mal diciéndolo, pero lo bueno fue que nunca deje mi pensamiento, por eso heme aquí de nuevo, recuperándome, de tan espantoso capitulo en mi vida-

Yo seguí comportándome color rosa muchos años, hasta que en mi camino se cruzaron personas valiosas, que veían el mundo como yo, pero no les dio miedo salir de allí, los prejuicios de la fascinante sociedad. Las admiraba, aun lo hago. Me deje llevar por esas personas, le dieron valor a mis pensamientos, razonamientos que no son validos en lo rosa, pues eres juzgado por no pensar como ellos te lo piden. Los rosas caminan en línea recta, tan recta que si te sales, quedas solo, pero en esa soledad tan genial has de encontrar otros seres que decidieron ser uno solo, y no cometer el riesgo de quedarte pensando espuriamente. Ellos te dan ánimo y te ayudan a parar cuando te has caído, pero debes hacerlo de la manera más especial, te cuesta, es un sacrificio pernicioso pero satisfactorio, y al supuesto final, donde llegas cada día te sientes afable contigo mismo. Es la tristeza más alegre que pueda existir…-

Estas personas no son como tú, pero mucho menos como los rosas. Ellos tienen algo en común, es como si todos perteneciéramos a ese mundo de color oscuro con una luz visible -me siento tan Fausto- donde cada uno aporta un espacio en ese circulo adictivamente narcótico. Somos complementarios diferentes.

Hoy por hoy me siento orgullosa de tomar ciertas decisiones en mi camino, ese giro tan drástico le dio vida a mi vida. Tuve que sacrificar relativamente mucho, pero para mi no fue nada, para tener mucho. Ahora vivo individualmente rodeada de personas estupendas y de verdad, no maniquíes que te entorpecen tus sentidos.

Nota: si has comprendido el texto es porque sabes de que te hablo y genial por ti, pero si lo sabes y no te quieres dar cuenta, como dice una amiga mía "lastima". Y si de verdad no te das por enterado de lo que digo, no sufras esforzándote que jamás entenderás. Pero creo que mas claro no puede estar.